Casas de campo

No importa si hablamos de una casa de campo para uso y disfrute personal o de una casa de campo reformada para alquilarla como alojamiento turístico porque, al final, lo que vas a buscar son prestaciones similares: eficiencia energética, comodidad, ocio y estética. Cuatro características que todos queremos que tengan nuestras casas de campo.

Hoy vamos a contaros qué es lo primero que debemos tener en cuenta en una reforma de casa rural o casa de campo porque, aunque pueda parecer que se busca lo mismo que en una vivienda convencional, la realidad es que hay ciertas diferencias.

Ejemplo de ello es que en la mayoría de reformas que se hacen en casas rurales se suele pedir presupuesto para la instalación o construcción de una piscina, lo cual es bastante normal teniendo en cuenta que este tipo de casa se utiliza como una segunda vivienda vacacional o, como ya hemos comentado previamente, un ingreso extra al alquilarla como alojamiento turístico. Así pues, vamos a comprobar cómo dotar a nuestra casa rural de las características expuestas.

Eficiencia Energética

¿Qué es lo que más energía puede gastar en una casa rural? Ni las lámparas, ni la cocina, ni los electrodomésticos… el mayor gasto energético suele provenir de aires acondicionados y calefacciones. Por eso, cuando hacemos una reforma, este es uno de los primeros puntos a tener en cuenta.

Aire acondicionado: para empezar debéis valorar bien si lo necesitáis o no. Dependiendo del área donde esté enclavada la vivienda, el verano puede ser más o menos agobiante. Hay zonas rurales donde, aunque haga cierto calor, la temperatura es soportable y al no haber edificios que paren el viento es muy posible que solo con abrir ventanas tengas corriente suficiente como para pasar el verano sin necesidad de instalar el aire acondicionado. Ahora bien, si el calor que se acumula en la casa es sofocante no hay que arriesgar nuestra salud, ni la de nuestros hijos y mayores, por lo que instalar aire acondicionado alimentado con placas solares fotovoltaicas puede que sea la mejor opción. El gasto de la instalación es elevado, pero el ahorro energético hará que amortices lo invertido en cuestión de año y medio o dos años, lo que hace que merezca la pena.

Además, aislar todos los cerramientos es indispensable pero como queremos mantener la estética rústica de la casa de campo nos veremos en la encrucijada de optar por lo moderno y eficiente o por mantener las ventanas y puertas viejas de la casa reparándolas previamente. El problema es que por mucho que repares no conseguirás la eficiencia energética que pueden aportarte los modernos cerramientos con la antiguas ventanas de la vivienda así que lo mejor es buscar una empresa de ventanas a medida y que tengan diferentes acabados para conseguir algo que se adapte totalmente tanto a la estética como al espacio requerido. En Internet encontramos fácilmente La Ventana Perfecta, una plataforma donde podemos encargar nuestras ventanas a medida y elegir el acabado que queramos, entre los que he encontrado uno de PVC que simula la madera rústica. En mi opinión, perfecto.

Calefacción: si hay algo en lo que podemos ahorrar es en calefacción porque las posibilidades de que nuestra casa rural cuente con chimenea son altas y, si no es así, normalmente tenemos posibilidad de instalarla. El calor de una buena chimenea es, probablemente, el más barato y menos contaminante que vamos a encontrar, y en el supuesto caso de que no nos sea posible tener chimenea de leña, siempre podemos optar por las estufas de pellets, eficientes y económicas.

Comodidad

Seamos sinceros, nadie quiere ir a pasar unas vacaciones a una casa rural si ésta no cuenta con unas comodidades mínimas. De ahí que muchos herederos de casas de campo y de casas en pueblos hayan decidido invertir un presupuesto previamente pactado para reformar dichas viviendas y tener las comodidades que tiene una casa en la ciudad. Hablo de cosas tan básicas como electricidad y agua corriente (aún hay viviendas que carecen de estas instalaciones), pero también de antena de televisión, de baños y cocinas actualizadas e incluso de cómodos sofás y sillones que no se hundan al sentarnos en ellos.

Ocio

Podríamos pensar en miles de cosas, pero en este tipo de casas rurales lo primero que queremos tener, y lo más demandado también, es una buena barbacoa, una terraza donde cenar y comer al aire libre, y una piscina para la época estival.

Aunque pueda resultar caro a priori, os aconsejo una barbacoa de obra por varios motivos: son más duraderas, fáciles de reparar, soportan condiciones climatológicas adversas y si tienes un poco de vista puedes fabricarlas con espacio para la leña, el carbón e incluso con un hueco para poner un pequeño frigorífico y tener a mano siempre bebidas frías.

En lo referente a la piscina os diré que lo más económico es instalar una piscina prefabricada ya que la construcción de una piscina in situ puede costar un ojo de la cara. Las piscinas prefabricadas de poliéster cuentan con todas las ventajas de una piscina de obra pero con los beneficios económicos que suponen las prefabricadas. Además, tened en cuenta que el poliéster es un material muy resistente, lo que garantiza la durabilidad y la firmeza de la piscina.

Y la terraza puede saliros tan cara o barata como queráis. Pensad que podéis empezar con unas sillas monas y una mesa de exterior, podéis poner un toldo para los días más soleados y empezar a disfrutar, pero también podéis instalar losa para hacer una terraza elevada (o madera) y podéis poner una pérgola o incluso construir un porche, etc. Todo dependerá del dinero que os queráis gastar.

Estética

En lo referente a la estética os diré algo: cada vez que una familia me pide que “modernice” una casa rural y hacen caso omiso a mis recomendaciones acaban arrepintiéndose, al menos en el 90% de los casos, porque el encanto que tiene la casa acaba por perderse si modernizas todo. Ahora bien, se pueden hacer reformas estéticas preciosas y actuales con materiales rústicos. Para ello os recomiendo que busquéis alguna tienda especializada donde seguro que encontraréis losa de piedra y baldosa con diferentes modelos, vigas de madera, ladrillo y teja para tejados e incluso balcones de forja. Os puedo asegurar que la vivienda quedará mucho mejor mimetizándola con el entorno que transformándola en algo que no es. Aunque todo es cuestión de gustos.

Una vez tengáis esas cuatro características cumplidas os puedo asegurar que el resto de mejoras que hagáis serán secundarias, aunque ya se sabe: cuanto más azúcar, más dulce.

Compartir
Facebook
Twitter

Noticias relacionadas

Scroll al inicio