Es España, el sector de las reformas en viviendas ha experimentado un aumento en los últimos años, y eso pese a que hubo un repunte en la venta de vivienda nueva. Sin embargo, hay varias razones que nos hacen decantarnos por las reformas, ya sea porque compramos más de segunda mano y queremos adaptar a nuestro gusto nuestro nuevo hogar o porque pensamos que reformarlo revalorizará la vivienda que queremos vender.
En el primer caso parece que ahora valoramos más cómo una buena reforma puede convertir el espacio que tenemos en la casa de nuestros sueños, o por lo menos, puede acercarse. Hay muchísimos canales en la televisión que tienen en parrilla infinidad de programas de reformas de casas o de decoración, que nos han hecho ser conscientes de las posibilidades que existen, antes de mudarnos sin más, y que antes no teníamos en cuenta.
Si lo que queremos es vender, hacerle las reformas adecuadas a nuestra vivienda también aumentará su valor y sus posibilidades de venta, siempre que los trabajos sean de calidad y la actualización se haga pensando en cubrir las demandas del mercado y no en nuestros gustos personales. En ese sentido lo mejor que podemos hacer es asesorarnos, ya que una vivienda puede aumentar su valor entre un 10-15%, según los profesionales de Reformaintegralgranada, pero no todas las actuaciones tienen el mismo valor. Por lo tanto, saber con qué presupuesto contamos y saber en qué deberíamos invertirlo es esencial.
Hacer reformas es especialmente rentable en el mercado de alquiler, donde cada vez hay más movimiento, y donde el mejor estado de la vivienda también nos asegura un mejor perfil inquilino, ya que podremos pedir más por la mensualidad y podremos exigir que se cumplan ciertas condiciones. Lo invertido se puede recuperar con más rapidez si las reformas nos ayudan a alquilar la vivienda, sobre todo si tenemos en cuenta que el mal estado de la vivienda puede que sea la causa de que no la alquilemos durante meses.
Reformas más solicitadas
Entre las reformas más demandadas encontramos la reforma del baño, el cambio de las ventanas y la distribución de las estancias, ya que lo que se busca ahora es el concepto abierto.
La adaptación del baño, no sólo a las nuevas tendencias y al estilo que nos guste, si no a las necesidades de las personas que viven en la vivienda, es una de las reformas estrella del sector. En nuestro país, con un elevado número de población envejecida, el cambio de las bañeras por platos de ducha es lo más buscado: mucho más accesible y seguro que la bañera, y con posibilidad de instalarse con materiales antideslizantes. Es por eso que la oferta ha crecido en variedad y sofisticación, ventajas que se suman a las existentes de ahorro de espacio y tiempo de limpieza.
La tendencia actual, cuando el presupuesto lo permite y el espacio también, es adaptar el número de baños al número de habitaciones existentes. Es decir, crear baños en suite para cada habitación, lo que traerá una gran revalorización en el mercado de alquiler de pisos compartidos, ya que sin duda marcará la diferencia con el resto.
Si nos centramos sobre todo en el diseño, una de las renovaciones más de moda es la creación de espacios abiertos y luminosos. En este sentido, la unificación de cocina y salón, creando lo que se conoce como “espacio abierto”, la tendencia americana por excelencia que está llegando a Europa, es lo más demandado. Los open spaces son la clave para que viviendas pequeñas ganen en metros, por lo menos visuales. El modelo de construcción de pasillos con puertas que desembocan al salón está obsoleto, aunque es un tipo de reforma que solo se aconseja en nuestra vivienda habitual. No todas las personas han evolucionado en cuanto al diseño, y este cambio, podría ser un problema a la hora de alquilarla a alguien más tradicional.
Por el lado más práctico, el estado de las ventanas es importante por la comodidad y por la inversión en energía. Además, el estado de las ventanas es algo que siempre van a tener en cuenta los posibles compradores e inquilinos. Unas ventanas aislantes aportan valor porque cumplen con tres objetivos: ahorro energético, reducción de ruidos y mejora de la estética. Como hemos comentado, lo que se busca es la creación de espacios luminosos, por ello la utilización del cristal es una tendencia en alza en la decoración, ya que cada vez se reconocen más los beneficios de cristales y vidrios en el diseño de interiores.